Habilidad: Es todo el contenido escrito en la caja de texto de la carta, la cual indica los requisitos necesarios para su uso (Si es que los tiene), los costes de activación (Si es que los tiene) y los efectos que puede generar, luego de ser utilizada.
Una habilidad se puede componer de tres elementos: Requisitos, Coste de Activación y Efecto.
Requisitos: Son las circunstancias o acciones de juego necesarias para usar una habilidad, los requisitos solo se verifican con cartas en juego, o sea con las cartas que se encuentran en alguna de las siguientes zonas de juego Línea de Defensa, Línea de Ataque, Línea de Apoyo, Reserva de Oro o Zona de Oro Pagado.
Coste de Activación: Es un requerimiento de recursos (cartas del Mazo, cartas de la Mano, Oros, cartas del Cementerio, cartas en juego, entre otros recursos).
Efecto: Es el resultado del uso de una Habilidad, que se define por las siguientes palabras o frases, o cualquier combinación de ellas: Destruir, Desterrar, Barajar, Descartar, Subir, Botar, Robar, Buscar, Mirar/Ver, Modificar Fuerza, Modificar Coste, Considerar, Generar, Cambiar de Controlador, Anular, Cancelar, Redirigir, Prevenir, Jugar otra carta, Quitar/Perder Habilidad, Utilizar efectos permanentes, Saltar Fases, Asignar, Resolver, Cargar, Portar, o cualquier otro efecto que puedan tener algunas cartas que no se encuentren descritos en esta lista.
Cabe mencionar que existen también costes de activación y requisitos de juego para jugar cartas y que funcionan de la misma forma, así como efectos que vienen directamente de jugar una carta y no de usar una habilidad, como es el caso de los Talismanes. Un efecto puede provenir de una habilidad resuelta o un Talismán resuelto.